El té de jazmín es una bebida extraordinariamente popular en China y Japón. La flor del jazmín da un aroma y un sabor intenso y delicado al té verde.
No es muy calórico, su sabor está muy logrado y es una excelente alternativa a cualquier otra bebida a media mañana.
El toque de miel no es muy intenso pero sí hace que la bebida sea más suave y agradable.
Ofrece una sensación de bienestar gracias a sus propiedades antioxidantes y relajantes.
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