Uno de los elementos de la cultura japonesa que más curiosidad suscita es el del arte del té, el chado. Con un largo proceso de preparación y con afán de que todos los asistentes participen de la degustación del té, esta ceremonia tiene un componente social y religioso.
La geisha de la figura ofrece una taza de té sencha teniendo junto a sí todos los utensilios necesarios para la preparación del té.
Destaca el color verde del kimono y todos los detalles de la figura, el peinado, la disposición de las manos,...