La Gran Ola de Kanagawa fue pintada por el pintor Hokusai en 1829 y es, sin duda, la obra pictórica más famosa de Japón. En ella se ve cómo una ola gigante se cierne sobre unas embarcaciones que no tienen ninguna posibilidad de esquivarla. Al fondo, se ve el monte Fuji, símbolo de lo sagrado y eterno, pequeño y lejano. La composición desprende un gran dramatismo. La ola tiene forma de garra y aparece imponente en primer plano.
Se le han dado muchas interpretaciones a esta pintura. Se ha visto en ella la imposibilidad de controlar las fuerzas desatadas de la naturaleza. La lucha y tenacidad del pueblo japonés frente a las adversidades de todo tipo. También el destino dramático de nuestras vidas frente a circunstancias que no podemos controlar. ¿Qué interpretación es la tuya?