Figurita de cerámica ideal para atraer la buena suerte y hacer propósitos.
Cuando decides qué meta alcanzar, le pintas un ojo, cuando la cumples, le pintas el otro.
El daruma representa al Bodhidharma, el monje budista que inició la filosofía Zen.
La leyenda dice que estuvo nueve años meditando en una cueva y por eso perdió el uso de sus brazos y sus piernas.
Por eso, el daruma tiene esa forma tan peculiar.
Este daruma tiene un buen tamaño, 9 cm. Decorará de forma exótica cualquier rincón de tu hogar.