La soja texturizada es una alternativa barata a la carne y el pescado, está hecha con la proteína de la soja una vez desgrasada.
Su principal característica es su textura, similar a la carne, no tiene olor ni sabor. Sus valores nutricionales son similares a los de la carne de ternera magra, aunque no ofrece las mismas vitaminas ni los mismos niveles de hierro asimilable.
Para trabajar la soja texturizada hay que seguir los siguientes pasos:
1- Hay que hidratarla remojándola en agua caliente hasta que se ablande, en una proporción de dos medidas de agua por una de soja. Es recomendable usar aderezos en el agua de remojo para que la soja vaya adquiriendo sabor. Se pueden añadir especias, salsa de soja, caldo, mirin...
2- La soja texterizada queda suelta, hay que usar algún aglomerante: harina de trigo, patata, cualquier otro tipo de harina... Una receta tipo pide 6 cucharadas de soja texturizada y 6 cucharadas de harina de trigo... si lo que queremos es usar la soja como carne picada, entonces no es necesario tener en cuenta este paso.
3- Si deseamos hacer hamburguesas o albóndigas, es recomendable meterlas en el congelador para que cojan forma, después se pueden echar a la sartén sin merma en el sabor.
La soja texturizada es un producto innovador, muy asequible y que abrirá nuevas posibildades en nuestro trabajo culinario.