El vinagre negro japonés (kuro su) se obtiene de la fermentación lenta del arroz integral durante un periodo de tiempo prolongado.
Se consigue un vinagre muy afamado por sus propiedades medicinales. En Japón es habitual mezclarlo con miel para beberlo directamente o diluído en agua. También se puede usar para añadirlo al zumo de naranja o como aliño a la piña o la fresa u otras frutas, y potenciar así sus propiedades.
Hay que destacar que funciona como anticoagulante, sirve para bajar la presión arterial y el colesterol y tiene propiedades adelgazantes.
También se puede usar sobre pescados asados (kabayaki), sobre platos de cocción (nabemono), en la elaboracion de vinagretas...